30 ene 2008

Depravado con chaucha fláccida ataca a joven indefensa

Escena: Agus pelando chauchas, alimento básico en la dieta marplatense, en la víspera de su cumpleaños. La llaman por teléfono y la joven se retira en el acto a hablar tranquila en un paredoncito de la otra cuadra. Empieza a oscurecer cuando de repente la muchacha percibe una sombra que se le abalanza, blandiendo en su mano un elemento fláccido y viscoso que le provoca la articulación inmediata de un grito desgarrador. "¡Salí de encima con esoooooooo!". Era su señor tío, que venía a mostrarle que las chauchas que ella había abandonado ya estaban hervidas (onda: "dejaste las chauchas a medio pelar"), en su paso hacia el quiosco para comprar cigarrillos.

Al rato, ya entrada la nochecita, se acerca un patrullero a la cuadra. Un policía baja y se le acecra a nuestra joven indefensa (que por lo visto parecía muy sospechosa hablando por celular, medio escondida detrás de un arbusto) con un revólver en la mano. "¿Es usted del barrio, señorita?" A lo que nuestra pálida damisela responde que sí, que vive en la esquina, y pregunta el porqué de semejante operativo policial en la cuadra, por cuanto el oficial responde: "No, es que los vecinos llamaron que había un hombre sospechoso rondando las calles del barrio."

Demás está decir que el hombre sospechoso era mi tío.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"blandiendo en su mano un elemento fláccido y viscoso" ... Me parece que es una descripción malintencionada y que tiene como objetivo desacreditarme... ... Adenás, como reconocés que "dejaste las chauchas a medio pelar", la responsabilididad por las características del objeto podría ser tuya... ja Beso